Los delitos de Lesa Humanidad no prescriben. Necesitamos de la memoria activa. Y ese es nuestro propósito y compromiso cuando cada día se continúa con las búsquedas de aquellos que fueron secuestraros y desaparecidos durante la última dictadura cívico militar.
La memoria colectiva es la herramienta para recordar nuestras raíces de identidad, como también la historia y la cultura. La desaparición forzada de personas forma parte de nuestra triste historia y por ello, por más que algunos sectores traten de negarlo, hay una comunidad que se organiza para continuar con el esclarecimiento de cada caso. Conocer la verdad será una forma de llegar a la justicia con el fin de que cada uno conviva conociendo cual es el derecho del otro. El futuro debe estar fundado en los acontecimientos que nos conformaron como sociedad, con sentido humanista y cristiano apoyando siempre a los sectores más necesitados. Y cada recuerdo debe ser atesorado, aunque duela, porque privarnos de ello, sería negar lo sucedido y la realidad.
Es por ello que cada 11 de febrero, desde Luz y Fuerza recordamos a nuestro “Por siempre Secretario General”, el querido compañero Oscar Smith. Es la fecha en la que fue interceptado a pocas cuadras de su casa en Sarandí. Cumplía con sus ideales y obligaciones, por ello defendía con todo empeño a los compañeros lucifuercistas que habían sido cesanteados injustamente, “prescindidos” de sus trabajos a raíz de que el gremio había sido intervenido y quedaron sin efecto los convenios colectivos por los cuales “El gato” Smith también bregaba.
Siempre lo recuerdo como un hombre con ideales inquebrantables preocupado por las necesidades de los trabajadores, también compartimos momentos difíciles junto a otros compañeros del consejo directivo, delegados y militantes del sindicato. En su nombre, va nuestro homenaje a todos los desaparecidos.
En la actualidad, en donde se pone en dudas la estabilidad laboral de muchos argentinos, donde los despidos son cotidianos; los gremios más que nunca deben estar presentes en la lucha por los derechos del trabajador. Así lo demanda el pueblo, así lo hubiese hecho nuestro compañero Oscar Smith. Abrazo como lo hago en cada ocasión a su familia, y nuestro homenaje permanente con los compañeros del gremio, a un amigo y sindicalista inolvidable, ejemplo para los trabajadores que defienden el bien común.
