Este martes murió el reconocido escribano de Avellaneda, Luis María Carbone, un protagonista de la historia de las últimas décadas en la ciudad.
Además de su profesión de escribano, Carbone colaboró con distintas instituciones del distrito, entre las que se destaca el Hospital Fiorito, donde coplaboró activamente en su crecimiento y mejora.
También tuvo una activa participación en su querido Racing Club. Como heredero del seis veces presidente de la institución, Carbone mantuvo viva su pasión por la Academia hasta su último aliento.
Su última actividad política en el club fue formando parte del trinomio con Rodolfo Molina y Pablo Podestá, como miembro de la agrupación Racing Vuelve.
La noticia de su fallecimiento impactó en los vecinos y vecinas del distritos, quienes seguramente mantendrán viva la memoria de Luis Carbone en cada obra y recuerdo que dejó en y para Avellaneda.
